(que me recuerda al inquietante autorretrato de Catherine Fox)
y alguno más de los que hace Lu Cong
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me impresionan pero me gustan, me atraen.
ResponderEliminarSaludos
Quizás se deba a la combinación de esa mirada directa y a la frialdad expresiva que denotan una inteligencia analítica..una intención muy directa… No sé,…resultan inquietantes y muy atractivas
ResponderEliminarPerdona que insista Judith pero revisando la galería de Lu Cong me ha parecido descubrir que es lo que "me" inquieta y se trata de la tensión psíquica que traducen esos rostros y que se refleja en esas miradas directas, sin pestañeo, secas, frías...sí...me gusta.
ResponderEliminar@Emmagunst Las personas retratadas son modelos reales, es evidente, de rasgos imperfectos que no se disimulan, pero que resultan estilizados en el cuadro. Ahí están las pecas, la nariz, las rojeces... pero al mismo tiempo solo toma relieve lo esencial; tienen atractivo y resultan inquietantes, y por ello atraen aún más...
ResponderEliminar@cumClavis Me gusta haber despertado tu curiosidad y que hayas saltado al enlace.
Los ojos que retrata Lu Cong no solo parecen no parpadear jamás, sino que tampoco tienen pestañas, como los de la Monalisa. Aunque la actitud general del modelo parece relajada, esos ojos, sí, son puro interrogante.
Y por favor: insiste, siempre que quieras, insiste más ;-)
ay, si! la ausencia de pestañas impresiona Arati!
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