Son pacientes artesanos que despliegan grandes exhibiciones de técnica... para lo poco que tienen que decir.
Personalmente prefiero a los artistas obsesionados por contar algo, aunque su oficio sea escaso y su realización torpe.
El "uso fotos para copiarlas" no es intrínsecamente malo, miren, miren lo que ha hecho Annalisa Pirovano
en su serie "gente tranquila":
gente tranquilla / gente tranquila óleo, 230x160x2cm, 2009 |
vicini non fanno rumore / los vecinos no hacen ruído óleo, 210x160x2cm, 2008 |
novantesimo minuto / minuto noventa óleo 150x100x4cm, 2009 |
Por cierto, en estos días en que nos van a embutir los juegos olímpicos como maíz por el gaznate de oca destinada a quedarse quieta, engordar y producir hígado hipertrofiado con el que preparar foie-gras para disfrute de los ricos, les recuerdo que se puede #vivirsinteledeporte.
Y salir a la calle. A pasear, a correr con el propio cuerpo, a protestar...