4/4/12

una vez por semana

Al principio eran dos veces por semana.
Con el tiempo pasamos a una y, luego ya, hasta que tuvimos que dejarlo, fue una vez cada quince días.

Pero tuve que ponerme en modo ahorro total y llevo meses haciéndolo yo sola.

Me esfuerzo en mantener el orden a diario y dedico el fin de semana a la limpieza general, pero hay cosas que detesto hacer, como por ejemplo los cristales: creo que estaban sin limpiar desde el verano pasado.

Me gustan los entornos limpios pero, la verdad, sería un alivio no tener que dedicar tanto tiempo a ese tipo de tareas. Prefiero dedicarme a leer en la bañera, por ejemplo.

Imagen de Vojtech V. Sláma

Sin embargo ayer, como cosa rara y excepcional, Ana vino a limpiar a casa. Albricias.

Fue magnífico. ¡Cuánto la he echado de menos!

Me quedé disfrutando de mis posesiones recién fregadas y puestas a cero como alma culpable y católica tras una confesión,  delicioso.

Imagen via Fostercare.tumblr


Y es que Ana, con su trabajo, sigue teniendo esa capacidad de hacerme realmente feliz.

Tenía que decirlo.

10 comentarios:

  1. Fantástica sensación y muy, pero que muy buena entrada Judith!
    (Entre tu y yo me he acordado de aquellos cuentos infantiles en los que a un zapatero l@s duendes le hacian el trabajo mientras dormía y aquel magnífico despertar...jo!)

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  2. Cuando alguien hace por tí algo pesado... ¡es estupendo! :-) Hay trabajos que se delegarían con mucho gusto a los duendes o als manairons, que en el Pallars tienen nombre propio y leyendas asociadas.

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  3. Magnífica leyenda, no la conocía! Se me ocurren posibles aplicaciones al liderazgo ;) o ideas como enviar una pequeña delegación de estos seres [minairons] al ministro de trabajo...¿te imaginas? què farem? què direm?

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  4. Y lo curioso es que cada uno detestamos un tipo de trabajo, afortunadamente todo sea dicho .... no me gusta nada planchar, me cansa, y últimamente cocino de manera "expres", prefiero que me hagan la comida .... pero me encanta ordenar y colocar las cosas ....
    Tengo 4 días de vacaciones ¡me encanta dormir sin hora de levantarme! .... me gustan los sueños que puedo recrear cuando estoy descansada ....

    ¡Feliz semana!

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  5. Ana y sus colegas, tan humildes pero tan imprescindibles... ¡y tan peligrosas para los ordenadores y demás instalaciones digitales!

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    1. Toda afanosa labor conlleva su pequeña dosis de desastres. En mi caso Ana tiende más a las lámparas, cada cual con sus tendencias y aficiones, son esos misterios que constituyen la pimienta de la vida.
      ;-)

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  6. Esa sensación la experimenté yo también; qué bien lo cuentas. Y esas dos ilustraciones son la monda, me encantan. Visitaré este sitio tan limpio y prometedor.

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    1. jajaja, Elvira, me encantará recibirte siempre que quieras, aquí en este blog que es como mi casa, pero que se mantiene más ordenado y con menos polvo...

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  7. Jo, els vidres, crec que els faig un cop a l'any... No tinc una Anna que em vingui a posar la casa lluent. Però aconsegueixo mantenir-la amb uns mínims acceptables de netedat.
    petó

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    1. Ai, Miquel, si et dic que hi havia vidres de la casa que portaven més d'un any esperant que tornés l'Ana a netejar-los! És una de les coses que més mandra em fa: buf i re-buf.
      Abraçada

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Me gusta saber que hay vida ahí afuera. No te cortes, anda, cuéntame...

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