"Spiegeltje" autorretrato de Jantina Peperkamp |
VIEJA AMIGA
Es ajena y extraña. Si la observas
no puedes evitar el sonreírte.
A nadie le interesan sus manías
—no digamos a ti que las conoces—.
A veces finges crédito a su historia
para no entristecerla.
Mas con todohas aprendido a valorar su astucia:
si su encanto ya no es el de una joven
hay días que aún consigue seducirte.
Los años van haciéndola más vieja,
un poquitín ridícula y sin duda
irritante. —¿De qué modo tratarla?—
Debes tener paciencia, pues al cabo
qué hacer si no.
Se trata de tu vida.
Fernando Ortiz, de Vieja amiga, 1984
Mirarte menos y disfrutar más?
ResponderEliminarElegir mirar lo bello?
Sonreir mas?
#hartadepenas
Miro por la ventana en vez de al espejo,
ResponderEliminarveo nevar copiosamente
observo con atención la trayectoria de los copos
movimientos armoniosos, pausados y dirigidos
por invisibles corrientes,
siempre atraídos por la gravedad
hacía la pausa definitiva.
Envejecen rápido, estáticos, seductores,
amarrados por el frío esperando fundirse.
Isabel: el tono de este poema me recuerda al del Vals de Aniversario de Gil de Biedma. El autor sí, mira hacia sí mismo, y mira con mirada penetrante y sin obviar ni un detalle ni arruga de su "vieja vida", pero la mira también con benevolencia y compasión, como a una vieja amante.
ResponderEliminarPaulino: Muchas gracias por aportar tu poema, tan en línea del post y con ese primer verso que encaja perfectamente con la lectura de Isabel.
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